los chicos crecen (no)

Hice un cuaderno. Hacía un montón que no me ponía las pilas en ponerme y hacer alguna cosita de esas; cosí las hojas, busqué cartón y arriba le pegué muchas cosas. Quedó lindo. El lunes estuve a punto de ir a la librería hasta que, buscando la libreta, encontré un montón de cuadernos viejos que dejé tirados, con las hojas todas desgastadas, apuntes de cosas que nunca terminé, cosas por el estilo. No sé, no tenía ganas de otro cuaderno que se uniera a esas cosas rotas. Los que más cuidé (estan casi intactos, pero todos escritos y con dibujos feos) fueron los de Jess muy especialmente porque me los hizo ella, por eso tenía ganas de hacerme algo que valorara de la misma forma. Extraño antes, cuando tenía las re ganas de hacer un montón de cosas, tenía fotos calculadas vagamente que quería sacar, hasta me quería hacer un portfolio mucho más adelante cuando juntara cosas lindas para ponerle, escribía más, qué se yo. Ando como dormida. Perdida. Quiero caer en que dentro de un mes y medio no voy a ir más al normal, pero no puedo, no hay caso. Hay algo que está re mal en todo esto ¿qué hacemos todos eligiendo YA las carreras? ¿no era que faltaba un montón? ¿ayer fueron dos meses que volvimos de bariloche??! A dónde se fue todo este año, no me pregunten.